Devocionales

Eres más preciosa que diamantes

Darlene Sala 3 de febrero de 2015
Ya que eres precioso a mis ojos, digno de honra, y yo te amo. Isaías 43:4a (LBLA)

¿Preciosa ante los ojos de Dios? ¿Puede ser verdad?

Es sorprendente que Dios claramente demuestra nuestro valor a través de la Biblia. Imagina cualquier cosa en esta tierra que valoramos, y es incomparable a lo que Dios siente por nosotras.

Piensa por un momento en los diamantes. Son uno de los objetos más valiosos de la creación. Son raros, hermosos y muy apreciados. Pero no son nada en comparación al valor que Dios nos otorga.

¿Realmente Dios piensa que tú y yo somos más preciosas que los diamantes? ¿Nosotras, quiénes tropezamos, caemos y fallamos más de lo que queremos admitir?

Es muy fácil hacer una afirmación sin hechos que la respalde. Si te detienes ahí mismo y asumes que el título es verdadero – que tú realmente eres más preciosa que los diamantes, puedes partir sintiéndote mejor contigo misma, sin tener ningún fundamento en qué basar tus sentimientos lindos. ¿Y cuánto duraría eso? Me temo que no por mucho tiempo.

Entonces, si vamos a compararnos con diamantes, ¿cuánto vale un diamante? En el año 2013, Sotheby subastó un diamante rosado sin defecto de casi 60 quilates llamado “La Estrella Rosa” por la enorme suma de 83.2 millones de dólares. Eso lo convirtió en la joya o diamante más caro que se haya subastado.

Pero, se nos ha dicho, que el diamante más precioso es el Koh-i-Noor, que ahora forma parte de la colección de British Crown Jewels. Los expertos dicen que esta gema no puede ser valorada - ¡se calcula que es aproximadamente 3.5 veces la riqueza del mundo entero!

Estos diamantes son increíblemente valiosos para nosotras. Pero para Dios, los diamantes no son tan preciosos. Ni tampoco otras piedras costosas, ni siquiera el oro. Después de todo, en el cielo, Él usa oro para pavimentar calles, perlas para las puertas en lugar de hierro forjado (Apocalipsis 21:21) y piedras preciosas para decorar los cimientos de la ciudad celestial (Apocalipsis 21:19).

¿Pero tú? Ahora, ese es otro asunto. Dios ha formado muchos diamantes. Pero solo creó uno de ti. Tú eres única. Eres diferente a cualquier persona que ha vivido o vivirá. Él te creó porque quiere a alguien exactamente como tú. Él tiene planes para ti.

Puede que en este momento te sientas insignificante y abatida. Probablemente la vida te ha arrojado más de lo que puedas soportar. No te sientes tan valiosa como un diamante de imitación siquiera, mucho menos como un diamante auténtico. ¡Anímate! “Eres preciosa ante mis ojos”, dice Dios, “y yo te amo” (Isaías 43:4a). Dios nunca dijo que amaba a un diamante, pero sí dice que te ama.

¿No lo sientes?

Solo piensa en esto: somos tan preciosas para Dios que Él envió a Su único Hijo Jesús a esta tierra para morir, para que tú y yo no tengamos que morir por la forma en que hemos estropeado nuestras vidas con el pecado. El autor David Eckman en su libro: Becoming Who God Intended, muestra a Dios explicandonos esto: “Mi Hijo muere por ti porque vales un Hijo para Mi”.

Solo piensa en esto: Dios dice, “¡Vales un Hijo para Mi!”.

Si alguna vez has dudado de tu propio valor, o no sabes a dónde ir desde dónde te encuentras, o si estás perdiendo la esperanza…. entonces escucha a Dios Padre diciéndote, “Eres tan importante para Mi como para justificar la muerte de Mi Hijo. Quiero tener una relación cercana e íntima contigo”.

No esperes ni un minuto más. Corre. Sí, corre a Sus abrazos ahora mismo. Deja que te susurre estas palabras, “Te amo, te amo”.

Dios, no me siento muy adorable. No importa cuánto lo intento, estropeo las cosas y termino sintiéndome culpable y desagradable. Pero hoy, voy a arriesgarme contigo. Voy a asumir que es verdad cuando dices que yo soy preciosa ante Tus ojos, y que me amas. Me arrojo en Tus brazos. Gracias, gracias por el amor que es más grandioso que todos mis errores. En el Nombre de Jesús, Amén.

VERDAD PARA HOY

Romanos 5:7-8, Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros. (NVI)

1 Juan 3:1, ¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! El mundo no nos conoce, precisamente porque no lo conoció a él. (NVI)

REFLEXIONA Y RESPONDE

Cuando Dios dice, “Eres preciosa ante mis ojos, y yo te amo”, ¿qué significa eso para ti?

¿Cómo puedes animar a una amiga con este pensamiento de hoy, tal vez por medio de un correo electrónico, un mensaje de texto o incluso una publicación en Facebook?

© 2015 por Darlene Sala. Todos los derechos reservados.

Estamos agradecidas a nuestras voluntarias por su trabajo realizado en la traducción de este devocional al español. Conócelas aquí.

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