Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios, sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos.
Efesios 5:15-16 NVI
Me topé con una estadística que para mi fue difícil de creer. Esta estadística dice que nosotras hoy en día tenemos más tiempo libre que la generación anterior a la nuestra. Pensé que debería de ser un error, así que comencé a investigar.
Pero cada estudio confirmó la estadística, a pesar de que muchos de nosotras pensamos que es lo opuesto a como nos sentimos en estos días — casi no tenemos tiempo, y estamos más ocupados que antes. Entonces, ¿por qué sentimos que tenemos menos tiempo libre, cuando de hecho tenemos más?
La verdad es que, somos ricas en tecnología y pobres en tiempo. Con todos los avances en las últimas décadas, nos hemos ahorrado una gran cantidad de tiempo. El trabajo de la casa se hace más rápido. La comunicación es casi instantánea. La información está a nuestro alcance. Pero con toda la tecnología viene la creencia de que podemos hacer más cosas, mucho más rápido y deberíamos hacerlo.
Y peor aún, la tecnología puede ser una distracción. Los mensajes de texto, notificaciones, correos electrónicos, redes sociales, juegos y anuncios digitales acerca de los zapatos que viste la semana pasada y que puedes comprar con un solo clic.
Sin que la mayoría de nosotras lo sepamos, hay un ejército de programadores involucrados batallando por nuestro tiempo. Cuanto más capturen nuestra atención, más le cobrarán a los anunciantes por el privilegio de mantenernos entretenidas. Así que, si bien tu misma te podrás culpar porque te sientes adicta al teléfono, la verdad es, que el mundo digital está diseñado para ganar más y más nuestro tiempo.
Y si no escogemos sabiamente, nos va a robar el tiempo que puede ser utilizado para conectarte de manera significativa con aquellos más allegados a ti y cumpliendo con el propósito por el cual Dios nos creó individualmente. Efesios 5:15-16 dice, Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios, sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos.
Las distracciones en el medio digital no es el único problema provocando que nos sintamos más ocupadas. Muchas de nosotras estamos conectadas en maneras que nos hacen vulnerables a no utilizar nuestro tiempo correctamente. Yo las llamo “vulnerabilidades principales.” ¿Alguna de estas describe tus hábitos?
- Optimismo (Usualmente subestimas cuánto tiempo necesitas para hacer algo).
- Perfeccionismo (Haces las cosas más difíciles de lo que son y tomas más tiempo “perfeccionándolas” — porque para ti nunca están bien hechas).
- Demasiada responsabilidad (Te pasas el tiempo haciendo cosas para otros, cosas que ellos pueden hacer y que deberían hacer por ellos mismos).
- Sobresaliente (Haces más de lo necesario con el propósito de ganar aceptación de otras personas o para recibir elogios).
- Adicción a la aprobación (Cuando dices que “sí” a todo lo que se te pida para evitar el sentimiento de culpa).
- Exceso de culpa (Cuando te comprometes demasiado y sobre compensas con sentimientos de culpabilidad).
Este listado de cosas que nos hacen vulnerables pueden influenciar en las opciones que tenemos de cómo utilizar nuestro tiempo. Estas nos pueden sabotear los mejores planes que Dios tiene para nosotras y puede causar estrés innecesario en el manejo del tiempo. Nuestras vulnerabilidades principales pueden abrir la puerta a una batalla espiritual en nuestra mente, oscilando nuestras decisiones entre sabias e imprudentes.
Dios nos llama a que seamos sabias. Él quiere que escojamos lo importante sobre lo rutinario y las falsas urgencias que nos llevan a un estrés y urgencia continuos, en lugar de propósito y satisfacción. Si no, estamos poniéndonos en riesgo de perder nuestro tiempo en cosas que parecen importantes— solo para después mirar atrás y darnos cuenta de que nos perdimos las cosas que sí son importantes.
Cuando estés tomando una decisión acerca de tu tiempo, pregúntate: ¿es importante… o solo rutinario? Sintonízate con la voz de Dios que te guía hacia lo que es significativo. Pon atención a Su voz.
Señor, gracias por el precioso regalo del tiempo. Ayúdame diario a ver el valor eterno de mi tiempo finito, para que yo pueda utilizarlo en maneras que te glorifiquen a Ti, y permíteme que me enfoque en las cosas que son más importantes a través de Tus ojos. Líbrame de mis inseguridades y malos hábitos emocionales como el perfeccionismo, la culpa inapropiada y las demasiadas responsabilidades que me causan ser imprudente en cómo utilizo mi tiempo. En el Nombre de Jesús, Amén.
VERDAD PARA HOY
Jeremías 29:11, Porque yo sé los planes que tengo acerca de ustedes, dice el Señor, planes de bienestar y no de mal, para darles porvenir y esperanza. (RVR 2015)
Eclesiastés 3:11a, 12-13. Todo lo hizo hermoso en su tiempo … Yo sé que no hay cosa mejor para el hombre que alegrarse y pasarlo bien es su vida. Y también, que es un don de Dios que todo hombre coma y beba y goce del fruto de todo su duro trabajo. (RVR 2015)
REFLEXIONA Y RESPONDE
En esta etapa de tu vida, ¿cuál es el uso más importante que le das a tu tiempo?
¿Cuáles distracciones digitales o vulnerabilidades principales hacen más difícil el que puedas controlar cómo utilizas tu tiempo?
© 2020 por Valorie Burton. Derechos reservados.
Proverbs 31 Ministries agradece a Thomas Nelson Publishers por patrocinar el devocional de hoy.
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