Paz en la batalla del querer
Dr. Joel Muddamalle
La mujer vio que el fruto del árbol era bueno para comer, y que era atractivo a la vista y era deseable para adquirir sabiduría; así que tomó de su fruto y comió. Luego dio a su esposo, que estaba...
Observen cómo crecen los lirios del campo. No trabajan ni hilan; sin embargo, les digo que ni siquiera Salomón, con todo su esplendor, se vestía como uno de ellos. Mateo 6:28b-29 (NVI)
Como ciudad sin defensa y sin murallas es quien no sabe dominarse. Proverbios 25:28 (NVI)
Vino a lo que era suyo, pero los suyos no lo recibieron. Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios. Juan 1:11-12 (NVI)
Trabajen de buena gana en todo lo que hagan, como si fuera para el Señor y no para la gente. Colosenses 3:23 (NTV)
¡Te alabo porque soy una creación admirable! ¡Tus obras son maravillosas, y esto lo sé muy bien! Salmo 139:14 (NVI)
pues aunque vivimos en el mundo, no libramos batallas como lo hace el mundo. Las armas con que luchamos no son del mundo, sino que tienen el poder divino para derribar fortalezas. Destruimos argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevamos cautivo todo pensamiento para que se someta a Cristo. 2 Corintios 10:3-5 (NVI)
Tu palabra es una lámpara que guía mis pies y una luz para mi camino. Salmo 119:105 (NTV)
Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes. 1 Pedro 5:7 (NVI)
Cuando habla, lo hace con sabiduría; cuando instruye, lo hace con amor. Proverbios 31:26 (NVI)
Yo en ellos, y Tú en Mí, para que sean perfeccionados en unidad, para que el mundo sepa que Tú me enviaste, y que los amaste tal como me has amado a Mí. Juan 17:23 (NBLA)
La mujer vio que el fruto del árbol era bueno para comer, y que era atractivo a la vista y era deseable para adquirir sabiduría; así que tomó de su fruto y comió. Luego dio a su esposo, que estaba...
Atrapen a las zorras, a esas zorras pequeñas que arruinan nuestros viñedos, nuestros viñedos en flor. Cantares 2:15 (NVI)
Entonces María dijo: «Aquí tienes a la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra». Y el ángel se fue de su presencia. Lucas 1:38 (NBLA)
De pronto, se unió a ese ángel una inmensa multitud—los ejércitos celestiales—que alababan a Dios… Lucas 2:13 (NTV)