Paz en la batalla del querer
Dr. Joel Muddamalle
La mujer vio que el fruto del árbol era bueno para comer, y que era atractivo a la vista y era deseable para adquirir sabiduría; así que tomó de su fruto y comió. Luego dio a su esposo, que estaba...
Bendito el hombre que confía en EL SEÑOR, y cuya confianza es EL SEÑOR. Será como un árbol plantado junto a las aguas y que extiende sus raíces a la corriente. No temerá cuando venga el calor, sino que sus hojas estarán verdes. En el año de sequía no se inquietará ni dejará de dar fruto. Jeremías 14:7-8 (RVA-2015)
Pero ahora, oh Señor, tú eres nuestro Padre. Nosotros somos el barro, y tú eres nuestro alfarero; todos nosotros somos la obra de tus manos. Isaías 64:8 (RVA 2015)
Así que no pierdan la confianza, porque esta será grandemente recompensada. Ustedes necesitan perseverar para que, después de haber cumplido la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido. Hebreos 10:35-36 (NVI)
Que el Señor, Dios de Israel, bajo cuyas alas viniste a refugiarte, te recompense abundantemente por lo que hiciste. Rut 2:12 (NTV)
Pues todos ustedes son hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús. Gálatas 3:26 (NTV)
No buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás. Filipenses 2:4 (NLT)
Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; Y su marido también la alaba: Muchas mujeres hicieron el bien; Mas tú sobrepasas a todas. Proverbios 31:28-29 (RVR1960)
… el Señor le restauró su bienestar. Es más, ¡el Señor le dio el doble de lo que antes tenía! Job 42:10b (NTV)
La oración del justo es poderosa y eficaz. Santiago 5:16b (NVI)
El Señor mismo peleará por ustedes. Solo quédense tranquilos. Éxodo 14:14 (NTV)
La mujer vio que el fruto del árbol era bueno para comer, y que era atractivo a la vista y era deseable para adquirir sabiduría; así que tomó de su fruto y comió. Luego dio a su esposo, que estaba...
Atrapen a las zorras, a esas zorras pequeñas que arruinan nuestros viñedos, nuestros viñedos en flor. Cantares 2:15 (NVI)
Entonces María dijo: «Aquí tienes a la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra». Y el ángel se fue de su presencia. Lucas 1:38 (NBLA)
De pronto, se unió a ese ángel una inmensa multitud—los ejércitos celestiales—que alababan a Dios… Lucas 2:13 (NTV)