Y hagan todo con amor. 1 Corintios 16:14 (NTV)
Me encanta ponerme metas de año nuevo. Y cada año, elijo mis metas de a tres.
He mantenido dos durante mucho tiempo. Me comprometo a comer nutritivamente y a hacer ejercicio intencionalmente, más que simplemente llevar la basura a la entrada de la casa una vez a la semana. Para mi tercera resolución, sin embargo, voy más profundo, más allá de trabajar en mi exterior, y elijo algo para transformar mi interior.
Sin embargo, reflexionando sobre 2021 y, francamente, todos los demás años, me doy cuenta de que he perdido mucho. Es como si la vida fuera una película, y yo solo soy un accesorio en la esquina, un extra en el mejor de los casos, casi siempre esperando en la parte de atrás. No me tomo el tiempo suficiente para la gente. En cambio, solo estoy desempeñando un papel escrito previamente con líneas que rara vez cambian.
“Hola, ¿cómo estás?”
“Bien. ¿Y tú?”
“Bien.”
“Que tengas un buen día.”
¿Por qué hago una pregunta si no quiero escuchar la respuesta? Tal vez sea porque la respuesta puede tomar demasiado de mi valioso y extremadamente limitado tiempo. Después de todo, hay cosas por hacer. Enviar correos electrónicos, lavar la ropa, hacer recados, pagar facturas y, si no voy al supermercado camino a casa desde el trabajo, no comeré verduras para la cena.
Pero Dios.
Dios es amor y Dios nos dice que nos amemos unos a otros. De hecho, Dios nos manda a través de Pablo en 1 Corintios 16:14 “Y todo lo que hagan, háganlo con amor.” (DHH)
Es por eso que mi gran desafío para el 2022 es amar, amar de verdad.
Pero, ¿cómo amo cuando valoro mi agenda personal por encima de las personas? Seguramente no es amor ignorar a la persona frente a mí mientras pienso en todo lo que tengo por delante. Cuando una amiga llama, no estoy mostrando amor al decir “ajá” mientras veo los últimos minutos de mi programa de televisión favorito. ¿El amor toma tan poco interés?
El amor verdadero, la forma en que Dios ama, se preocupa más por las personas que por las tareas… sin importar la cantidad de ropa que tengo para lavar. Las relaciones, el amor y el cuidado de las personas, no se comparan con el tiempo de televisión y las tareas pendientes durante todo el día.
He pasado por alto oportunidades para conectarme, dar amor, vivir el amor. Estoy segura de que ha habido muchas ocasiones en las que hice la pregunta “¿cómo estás?”, y la persona a quien se supone que debo amar quería o necesitaba que yo escuchara la respuesta. Tal vez ella recibió un diagnóstico difícil, o perdió su trabajo, o ella estaba pasando por un momento difícil en su matrimonio y necesitaba a alguien que pudiera interesarse y orar, pero mi cara decía: Tengo que irme. No tengo tiempo para ti.
¿Qué haría el amor? El amor se quedaría. El amor querría escuchar la respuesta. Por lo tanto, el amor realmente escucharía.
Sin distracciones, prestando total atención, allí mismo, en ese momento, amando a la persona como lo hace Dios, sin verla como un obstáculo para mis planes. Sin pensar en la confusión de la fila de autos en la mañana o la reunión de esta noche, solo escucha con paciencia. Totalmente comprometida, sin distracciones, realmente escuchando, atendiendo, asentándote en el amor.
Claro, hay fechas límites y momentos en los que realmente no hay tiempo, al menos no en ese momento. Pero más tarde, el amor establece un momento para volver a estar en contacto. El amor sigue, sigue hasta el final.
En 2022, elijamos amar. Escuchar atentamente. Vivir el amor y mostrar amor a las personas con las que estamos. Preguntémos “¿cómo estás?” con nuestros corazones y oídos bien abiertos. Porque eso es lo que haría el amor, y yo decido amar. ¿Me acompañas?
Señor, abre mis ojos, corazón y oídos para vivir y dar amor. Por favor, no me dejes pasar otra oportunidad sin amar. En el Nombre de Jesús, Amén.
Como devocional patrocinado, las dos secciones siguientes pueden contener enlaces de contenido solo en inglés.
Recomendamos
Hay mucho más que aprender sobre el amor. Si deseas profundizar más, el libro de Kim Sorrelle, Love Is: A Yearlong Experiment of Living Out 1 Corinthians 13 Love, está disponible aquí.
Conéctate
Conéctate con la escritora del devocional de hoy, Kim Sorrelle, en su sitio web o en Facebook e Instagram.
Profundicemos
1 Corintios 13:13, … Tres cosas durarán para siempre: la fe, la esperanza y el amor; y la mayor de las tres es el amor. (NTV)
¿Cuál es tu mayor desafío cuando se trata de amar a los demás? ¿Cómo crees que saber más sobre el amor podría cambiar tu vida? Dinos en los comentarios.
© 2021 por Kim Sorrelle. Todos los derechos reservados.
Proverbs 31 Ministries agradece a Kregel Publications por patrocinar el devocional de hoy.
Haz click aquí para ver nuestra política sobre los enlaces de terceros.
Estamos agradecidas a nuestras voluntarias por su trabajo realizado en la traducción de este devocional al español. Conócelas aquí.