»Bezalel, Aholiab y toda persona hábil en quien el SEÑOR ha puesto sabiduría e inteligencia para saber hacer toda la obra de construcción del santuario, harán todo conforme a lo que el SEÑOR ha ordenado». Éxodo 36:1 (NBLA)

Después que Dios los liberó milagrosamente de siglos de esclavitud en Egipto, los hebreos se adentraron en un desierto sombrío. Dios estaba guiando a Su pueblo en su viaje hacia la tierra prometida, y en el Monte Sinaí, dijo a Israel, “Constrúyeme un hermoso santuario”. Los detalles de cómo hacer cada cosa fueron asignados a trabajadores calificados: “»Bezalel, Aholiab y toda persona hábil en quien el SEÑOR ha puesto sabiduría e inteligencia” (Éxodo 36:1).

¿Acaso Bezalel, Aholiab y los demás se despertaron una mañana en el desierto con un repentino talento para la orfebrería, la carpintería y el bordado? Dios podría haberlo hecho de esa manera. Lo más probable es que adquirieron sus habilidades mientras eran esclavos en Egipto.

Día tras día, año tras año, pudieron haber utilizado sus talentos bajo la dirección de los señores paganos. Perfeccionaron sus habilidades con pocas esperanzas de hacer algo más grande y mejor. Dios sabía lo que iba a pasar (Éxodo 31:1-6). Ellos no tenían idea.

Avancemos hasta hoy ¿Qué habilidades estás perfeccionando en tus tareas rutinarias, bajo la dirección de un jefe difícil o solo para pagar la comida en tu mesa? Dios puede estar puliendo tus habilidades para proyectos más grandes y mejores que están por venir y que mostrarán Su gloria.

Durante años, redacté minutas de reuniones, escribí cartas comerciales y elaboré el contenido de los boletines informativos. Ayudaba a mantener a mi familia, y era un trabajo necesario, pero no era mi llamado de parte de Dios. Entre lágrimas, me lamentaba, “¿cuándo haré lo que realmente estoy llamada a hacer para Dios?”. En aquel entonces, no tenía ni idea. Pero en realidad, Él estaba perfeccionando mis habilidades, preparándome para escribir para Su gloria.

A veces anhelamos hacer algo grandioso para Dios, pensando que un día despertaremos con el talento repentino para lograrlo. No nos damos cuenta de cómo Dios ha estado desarrollando poco a poco el talento necesario en nuestro conjunto de habilidades.

Imaginemos a esos artesanos hebreos. Dios instruyó tejer querubines en las cortinas del tabernáculo (Éxodo 36:8). Los querubines, con cuatro alas y cuatro caras, son difíciles de dibujar y aún más difícil de bordar.

¿Cuántos diseños habrán sido probados y rechazados antes de encontrar uno digno para el tabernáculo sagrado de Dios? Las líneas trabajadas con mucho esfuerzo quizás se deshicieron y se volvieron a hacer. La Biblia no menciona el número de correcciones. Solo sabemos que el producto final fue glorioso.

Del mismo modo, lees un devocional aquí, y te toca el corazón. No ves las correcciones… la primera, la segunda, la vigésimo segunda versión que no estaban del todo bien.

Querida hermana, ¿te preguntas (como lo hago yo) cuándo pondrá Dios tus habilidades al servicio de Él? ¿Te sientes atascada en un desierto de correcciones? ¿Piensas que lo que se hace para la gloria de Dios debería ser fácil?

¡No temas!

Al igual que los artesanos en Éxodo, eres una obra en proceso. Dios está perfeccionando tus talentos. Puede que lo intentes y falles muchas veces antes de hacerlo bien.

Dios tiene un plan para tu tejido, tus escritos, tus habilidades especiales. Confía en Él y sigue trabajando. Ya llegará tu momento.

Señor Dios, Tú sabes cuánto deseo hacer algo bueno para Tu gloria. Soy impaciente con el desarrollo de habilidades y las correcciones. Dame ojos para verlo como práctica, no como fracaso. Haz que pase de ser una despistada a una cooperadora. En el Nombre de Jesús, Amén.

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La espera puede ser dura… ya sea por ese trabajo de tus sueños, por empezar esa familia o por esa petición de oración que has estado pidiendo a Dios durante varios años. Es difícil. Pero sabemos que en la espera podemos convertir nuestras preocupaciones y temores en adoración, porque sabemos que Dios hace todas las cosas hermosas con el tiempo. De la preocupación a la alabanza te ayudará a encontrar paz cuando sientas la tentación de entrar en pánico, a luchar contra el miedo que está jalando tu corazón hacía los peores escenarios y a practicar la confianza en Dios en medio de circunstancias inciertas. Haz clic aquí para ver nuestra descarga gratuita de los capítulos 1-3.

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PROFUNDICEMOS

Efesios 2:10, Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica. (NVI)

Salmos 139:16, …todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos. (NVI)
 

¿Qué habilidades tuyas has visto que Dios utiliza para Su gloria? Comparte tus dudas, correcciones y descubrimientos en los comentarios.

© 2022 por Shirlee Abbott. Todos los derechos reservados.

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