… corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de Él soportó la cruz, despreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios. Hebreos 12:1-2 (NBLA)
![]( "d3.29-24_spanish")
Nota de la editora: ¡Este devocional es parte de una serie especial para la Semana Santa! Desde el 24 de marzo (Domingo de Ramos) hasta el 31 de marzo (Domingo de Pascua), cada devocional se centrará en los acontecimientos que preceden la resurrección de Jesús. Nuestra oración es que estas palabras preparen tu corazón y mente para la celebración de nuestro Salvador resucitado.
Llega como un susurro. Un pensamiento a viva voz entre la multitud. ¿Qué hacer con este hombre que dice ser Rey? Dos palabras resuenan, nadan entre las olas del sonido para consumir el océano de personas reunidas:
“«¡Crucifícalo!»” (Marcos 15:13-14, NBLA).
Los ánimos se encienden y la gente comienza a hartarse. Este hombre con ojos tiernos dice ser el Mesías. Él promete salvar a Israel, guiar a Su pueblo. Pero Él no le ha dado a la multitud el cambio que ellos esperaban. Por el contrario, Él habla de agua viva (Juan 7:38) y de una puerta estrecha hacia una eternidad amplia (Mateo 7:13-14). Él predica sobre el amor al prójimo y dar la otra mejilla (Mateo 5:38-40).
Los líderes religiosos no lo toleran y, con un suspiro de resignación, Pilato consiente a las demandas de la multitud. Jesús es sentenciado a muerte.
El Consolador es condenado y guiado fuera y los soldados lo azotan y se burlan de Él. Una corona de espinas. Una túnica roja. Expresiones con burla, “«¡Salve, Rey de los judíos!»” (Mateo 27:29, NBLA).
Y luego, la cruz. “Crucificar” significa causar muerte al clavar o atar las manos y los pies a una cruz. Significa destruir el poder y la dignidad de la persona condenada, mortificarla y tratarla cruelmente. Ellos golpean los clavos en la piel de Jesús, lo amarran a los pedazos de madera. Le dicen que puede bajarse de aquella cruz si en realidad fuera el Hijo de Dios (Mateo 27:39-43).
Pero el Hijo se mantiene callado, Su respirar inconsistente, fatigado. Él soporta la cruz, no para comprobar un argumento o para impresionar a las masas. Él soportó todo por gozo.
¿Qué gozo puede haber en las burlas, los golpes y el abandono? ¿Qué clase de amor conmueve a Jesús a permanecer en esa terrible cruz?
Un amor que perdura.
…Jesús [es]… el autor y consumador de la fe, quien por el gozo que tenía delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios (Hebreos 12:2, RVA-2015).
Por el gozo delante de Él, sufrió dolor, humillación y soledad porque Él sabía que a través de Su sacrificio, nosotras podríamos tener una vida con Dios para siempre. Jesús colgó por nosotras, para pagar el precio por todo lo que hemos hecho mal o que podremos hacer mal. El recibió el castigo que merecemos, experimentó angustia como no tenemos idea y como nunca conoceremos si confiamos en Él para salvación. En Cristo, somos aprobadas por Dios, de una vez y por todas.
El amor de Jesús lo motivó a soportar la cruz y nos da el poder para soportar nuestras propias situaciones difíciles. Nuestro Salvador es empático con nosotras porque Él mismo experimentó sufrimientos y muerte y ha vencido. Nosotras también tenemos garantizada la esperanza de que venceremos porque Jesús ya venció antes que nosotras.
Imagina este momento: Jesús levanta Sus ojos al cielo, respirando sutilmente. Con lo que queda de aire en Sus pulmones, Él entrega Su espíritu (Mateo 27:50). Consumado es. Él ha abierto el camino para que nosotras seamos reconciliadas con Dios. Gozo es lo que le espera a cada persona que cree en Él.
No hay palabras suficientes para describir lo que Jesús experimentó para salvarme. No puedo ni imaginar la oscuridad y el dolor que cayó sobre Él, el peso que Él cargó. Gracias Señor, por enviarnos a Jesús y por Su disposición para sacrificarse por todos nosotras. Yo deposito toda mi esperanza en Él porque Él entregó todo por mí. Gracias porque Él soportó la cruz para que yo pueda acercarme a Ti. En el Nombre de Jesús, Amén.
RECOMENDAMOS
Encuentra una selección exclusiva de nuestros libros favoritos, llenos de verdades de Dios y disponibles en español al visitar nuestra librería de Proverbs 31 o Christianbook.com.
CONÉCTATE
¿Buscas más aliento? Proverbs 31 Ministries tiene recursos bíblicos gratuitos en español que traerán esperanza y te ayudarán a navegar el día a día.
PROFUNDICEMOS
Isaiah 53:4-5, Ciertamente Él llevó nuestras enfermedades, Y cargó con nuestros dolores. Con todo, nosotros lo tuvimos por azotado, Por herido de Dios y afligido. Pero Él fue herido por nuestras transgresiones, Molido por nuestras iniquidades. El castigo, por nuestra paz, cayó sobre Él, Y por Sus heridas hemos sido sanados. (NBLA)
¿Cómo cambia tu perspectiva de la Semana Santa el saber que Jesús fue a la cruz voluntariamente por tu gozo? ¿Cómo puedes reflejar tu agradecimiento por Él en tu diario vivir?
Comparte tus pensamientos en los comentarios.
© 2024 por Sarah Freymuth. Todos los derechos reservados.
NUESTRAS CREENCIAS
Si la vida se siente increíblemente difícil, haz clic aquí para acceder a nuestros recursos de consejería y asesoramiento.
Estamos agradecidas a nuestras voluntarias por su trabajo realizado en la traducción de este devocional al español. Conócelas aquí.