»Pero Yo les digo la verdad: les conviene que Yo me vaya; porque si no me voy, el Consolador no vendrá a ustedes; pero si me voy, se lo enviaré. Juan 16:7 (NBLA)
Me siento tan sola. ¿A dónde puedo ir de aquí?
Creo que todas hemos estado aquí en algún momento de nuestras vidas, ya sea como resultado de circunstancias fuera de nuestro control o de aislamiento de nuestra propia elección.
Recuerdo una temporada increíblemente difícil en mi vida en la que me encontré alejándome de todos, incluso de mis amigas más cercanas. Antes de darme cuenta, un día me desperté sintiéndome más sola de lo que me había sentido en mi vida. Seguí sonriendo y diciendo cosas como: «Estoy bien. Todo va bien. Estoy bien». Pero por dentro lloraba. «Jesús, ¿dónde estás? ¿Por qué pareciera que no estás presente? ¡No entiendo por qué estás permitiendo que sucedan todas estas cosas difíciles!»
Estar solas no solo nos desanima. También es un lugar peligroso para estar. Si el enemigo puede aislarnos, puede influir en nosotras y engañarnos. Uno de sus puntos de entrada favoritos es a través de la soledad que sentimos.
Es por eso que estoy tan agradecida por las palabras de Jesús en Juan 16:6-7: “Pero porque les he dicho estas cosas, la tristeza ha llenado su corazón. »Pero Yo les digo la verdad: les conviene que Yo me vaya; porque si no me voy, el Consolador no vendrá a ustedes; pero si me voy, se lo enviaré” (NBLA).
Podemos sentirnos solas, pero gracias al Espíritu Santo, nunca estamos completamente solas y nunca sin guía. Jesús promete que el Espíritu “…los guiará a toda la verdad…” (Juan 16:13, NBLA).
Las palabras de Jesús en este pasaje habrían parecido completamente incomprensibles para Sus discípulos. Deben haber pensado: «después de todo lo que hemos pasado juntos, ¿nos vas a dejar?» Pero el hecho de que Jesús muriera y partiera de la tierra no fue un acto de crueldad. Fue un acto de bondad. Cuando se fue, prometió enviar el Espíritu Santo, lo cual fue ventajoso para los discípulos.
Si sientes que estás navegando por las dificultades sola hoy, recuerda estas verdades sobre el Espíritu Santo para aquellas que son seguidoras de Cristo. El Espíritu Santo…
Te ayuda (Juan 14:16; Juan 16:7).
Convencerá de pecado (Juan 16:8).
Te guía (Juan 16:13).
Habita en ti (Juan 14:17).
Te enseña (Juan 14:26).
Intercede en oración por ti (Romanos 8:26).
En mi temporada de soledad intensa, mi perspectiva cambió cuando comencé a pedirle al Espíritu Santo que me hablara. No hice de esto un ejercicio complicado. En lugar de tener miedo del silencio, traté de apoyarme en él, susurrando: «Espíritu Santo, ¿qué quieres decirme ahora mismo? Estoy escuchando. Por favor, guíame. Consuélame. Convénceme. Y cuando mi angustia comience a hacerme olvidar la fidelidad del Señor, ayúdame a verlo».
Tal vez necesites hacer una pausa y orar estas palabras ahora mismo, amiga. El Espíritu Santo te guiará cuando el camino por delante parezca incierto. Recuerda: Dios no se esconde de nosotras. Está esperando a que lo veamos. Y nadie puede ayudarnos a ver la fidelidad de Dios más que el Espíritu Santo. Él está con nosotras. Y en medio de tantas incertidumbres en la vida, Él es una certeza con la que siempre podemos contar.
Amado Señor, gracias por el don del Espíritu Santo y por no dejarme enfrentar las dificultades sola. Por favor, dame la oportunidad de ayudar a otra persona a sentirse menos sola hoy. En el Nombre de Jesús, Amén.
En su devocional Lo vas a lograr, Lysa TerKeurst te ayuda a permanecer conectada con Dios incluso en medio de circunstancias desalentadoras, decepcionantes o incluso devastadoras. Cuando la vida te parece demasiado dura, incorpora un nuevo ritmo de recibir y soltar: recibir el aliento, la instrucción y la verdad de Dios para empezar el día, y soltar a Dios todo lo que te agobia al final de cada jornada. Él te pondrá en el camino de la sanidad.
¿Buscas más aliento? Proverbs 31 Ministries tiene recursos bíblicos gratuitos en español que traerán esperanza y te ayudarán a navegar el día a día.
Juan 16:33, Estas cosas les he hablado para que en Mí tengan paz. En el mundo tienen tribulación; pero confíen, Yo he vencido al mundo». (NBLA)
¿De qué manera anima tu corazón el conocer el plan intencional de Dios para enviar al Espíritu Santo? ¿Cuál es una manera en que podrías invitar al Espíritu Santo a que te ayude en esta temporada?
¡Nos encantaría saber de ti! Comparte tus pensamientos en los comentarios.
© 2025 por Lysa TerKeurst. Todos los derechos reservados.
NUESTRAS CREENCIAS
Si la vida se siente increíblemente difícil, haz clic aquí para acceder a nuestros recursos de consejería y asesoramiento.
Al asociarte con nosotras en Proverbs 31 Ministries, estás cumpliendo la gran comisión de amar a Dios, amar a la gente y alcanzar al mundo con la esperanza de Jesús. Tu generosidad realmente marca toda la diferencia.
Todas las donaciones son deducibles de impuestos en EEUU, y el 100% es invertido en el ministerio.
Estamos agradecidas a nuestras voluntarias por su trabajo realizado en la traducción de este devocional al español. Conócelas aquí.
Únete a la conversación