Devocionales

Cuando sientes que te estás quedando atrás

Meghan Ryan 7 de marzo de 2022
Yo confío en que veré la bondad del SEÑOR mientras estoy aquí, en la tierra de los vivientes. Salmo 27:13 (NTV)

Era una reunión típica de martes por la noche con tres de mis mejores amigas. Sin embargo, muchas cosas habían cambiado en las últimas semanas. Una de ellas había dado a luz y otra se había casado; la tercera estaba hablando de una nueva y emocionante oportunidad de trabajo.

Mientras yo sostenía al bebé de mi amiga en su hermosa casa nueva, y escuchaba todas las noticias que realmente me emocionaban, sentí que empezaba a llenarme de pánico.

No tenía nada nuevo que compartir. Ni siquiera tenía en perspectiva una casa, un marido, un bebé o un ascenso laboral.

La mentira se repetía en mi cabeza: me estoy quedando atrás.

¿Alguna vez te has sentido como yo, como si todo el mundo siguiera adelante sin ti? ¿Como si todo el mundo se graduara a una nueva etapa de la vida y tú estuvieras atorada donde te encuentras? Ya sea al ver a otra amiga casarse o tener un bebé, o al descubrir que alguien que conoces va a comprar una casa, es fácil mirar a tu alrededor y preguntarte: ¿qué me perdí?

En esos momentos, a menudo me cuestiono: ¿Acaso no estaba en la ciudad adecuada, o en el trabajo correcto? ¿Me he perdido lo que Dios me estaba llamando a hacer? ¿Por qué parece que la vida de todos avanza excepto la mía?

El Salmo 27:13 nos dice dónde podemos poner nuestra confianza cuando nos sentimos rezagadas: “yo confío en que veré la bondad del SEÑOR mientras estoy aquí, en la tierra de los vivientes”.

Al reflexionar sobre este versículo, sé que esas preguntas que me hago no son ciertas. Puedo ver destellos de la bondad de Dios en este momento. Puedo ver algunas de las formas en que Él ha estado trabajando en los detalles de mi vida a lo largo del camino. Y cuando me detengo a reflexionar en esto, recuerdo que la vida no se trata de llegar al próximo destino o de graduarse a otra de sus fases; se trata de ser fiel con lo que está frente a ti y a tu alrededor en este momento. (Hebreos 11:13)

Si hoy sientes que te “estás quedando atrás”, aquí hay cuatro maneras para combatir esas mentiras:

  1. Ora con honestidad. Podemos seguir siendo honestas sobre lo que anhelamos, incluso cuando aprendemos a disfrutar de lo que tenemos ahora. La oración tiene el poder de cambiar las cosas, así que no dejes de pedir y creer para que Dios se mueva. (1 Pedro 5:7)
  2. Deja el teléfono. Cuando dejamos de mirar lo que tienen los demás o lo que están haciendo, somos más capaces de amar la vida que tenemos delante. (Santiago 3:16)
  3. Practica la gratitud. Detenernos lo suficiente para apreciar los regalos que Dios ya nos ha dado, minimiza ese sentir de que nos estamos perdiendo algo. (1 Tesalonicenses 5:18)
  4. Cambia tu perspectiva. Hay cosas en mi vida actual por las que solía orar, y esa perspectiva cambia mi forma de vivir. También hay cosas en mi vida por las que otras personas están orando. (Hebreos 12:2)

Todavía hay muchos días en los que me siento frustrada por las cosas que no han cambiado en mi vida. Pero cuando miramos hacia atrás y vemos la evidencia de la fidelidad de Dios, entonces podemos tener la confianza de que Él sigue siendo fiel ahora.

La próxima vez que experimentes el temor de sentirte estancada, recuerda: no lo estás.

Dios está escribiendo una historia que es única para TI. Puede que no sea la historia que quieras, y puede que no sea en el tiempo que quieras, pero Él no te está dejando atrás. Una y otra vez, la Biblia nos muestra que Él no se ha olvidado de nosotras. Como dice Romanos 8:28, todo lo que Él está haciendo entre bastidores es para tu bien y para Su gloria.

Dios, cuando me sienta rezagada, recuérdame que Tú me tienes justo donde me quieres. Cuando tenga la tentación de mirar a la derecha o a la izquierda y comparar mi situación con la de las personas que me rodean, ayúdame a mirar hacia Ti. Gracias por la historia que estás escribiendo para mi vida. En el Nombre de Jesús, Amén.

RECOMENDAMOS

Amiga, puede que sientas que no estás donde necesitas estar en la vida ahora mismo, pero Dios te tiene exactamente dónde quiere que estés. No permitas que la trampa de la comparación te quite el lugar actual en el que Dios te tiene. Como dice en Eclesiastés 3:11 (NTV), “Dios lo hizo todo hermoso para el momento apropiado”. Para ayudarte a superar estos momentos, la autora Shannon Popkin, en su libro ¡No seas una mujer controladora!, comparte de su propia experiencia y de la vida de mujeres en la Biblia para ayudar a las lectoras a dejar sus cargas y encontrar la paz. Al entregar tus cargas a Él, puedes descansar sabiendo que Dios está en control. Obtén tu copia hoy, y ríndele a Dios el control de dónde quieres estar.

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En Proverbs 31 Ministries, creemos que cuando las mujeres conocen la Verdad y viven la Verdad, todo cambia. Hemos escuchado las voces que piden contenido en español y creemos firmemente que el Señor traerá a las personas correctas a nuestro equipo mientras enseñamos a las mujeres a alinear sus vidas a la Verdad de la Palabra de Dios.

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PROFUNDICEMOS

Salmo 31:19, Cuán grande es tu bondad, que atesoras para los que te temen, y que a la vista de la gente derramas sobre los que en ti se refugian. (NVI)

¿Cuál es una forma de practicar el cambio de perspectiva en tus circunstancias hoy?

¿Cuáles son algunas de las cosas por las que estás agradecida en este momento?

¡Nos encantaría saber de ti! Comparte tus ideas en los comentarios.

© 2022 por Meghan Ryan. Todos los derechos reservados.


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