El peligro de la deriva
Sharon Jaynes
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
… «SI USTEDES OYEN HOY SU VOZ, NO ENDUREZCAN SUS CORAZONES, COMO EN LA PROVOCACIÓN, COMO EN EL DÍA DE LA PRUEBA EN EL DESIERTO … POR LO CUAL YO ME DISGUSTÉ CON AQUELLA GENERACIÓN, Y DIJE: “SIEMPRE SE DESVÍAN EN SU CORAZÓN, Y NO HAN CONOCIDO MIS CAMINOS”; COMO JURÉ EN MI IRA: “NO ENTRARÁN EN MI REPOSO”». Hebreos 3:7-8, 10-11 (NBLA)
En cambio, hablaremos la verdad con amor y así creceremos en todo sentido hasta parecernos más y más a Cristo, quien es la cabeza de su cuerpo... Efesios 4:15 (NTV)
Entonces, ellos lo adoraron y luego regresaron a Jerusalén con gran alegría. Lucas 24:52 (NVI)
Pero yo digo: ¡ama a tus enemigos! ¡Ora por los que te persiguen! De esa manera, estarás actuando como verdadero hijo de tu Padre que está en el cielo. Mateo 5:44-45a (NTV)
Por lo tanto, imiten a Dios en todo lo que hagan porque ustedes son sus hijos queridos. Efesios 5:1 (NTV)
...«Voy a hacer que todo mi bien pase delante de ti, y delante de ti voy a proclamar mi nombre, que es EL SEÑOR. Éxodo 33:19a (RVC)
Este es el día que el SEÑOR ha hecho; Regocijémonos y alegrémonos en él. Salmo 118:24 (NBLA)
Por tanto, no desechen su confianza, la cual tiene gran recompensa. Porque ustedes tienen necesidad de paciencia, para que cuando hayan hecho la voluntad de Dios, obtengan la promesa. Hebreos 10:35-36 (NBLA)
No se preocupen por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. Filipenses 4:6-7 (NVI)
Acérquense a Dios, y Él se acercará a ustedes. Santiago 4:8a (NBLA)
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
—Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios ha hecho por ti. Así que el hombre se fue y proclamó por todo el pueblo lo mucho que Jesús había hecho por él. Lucas 8:39 (NVI)
pero el ángel los tranquilizó. «No tengan miedo—dijo—. Les traigo buenas noticias que darán gran alegría a toda la gente. ¡El Salvador—sí, el Mesías, el Señor—ha nacido hoy en Belén, la ciudad de...
Mi alma se aferra a ti; tu mano derecha me sostiene. Salmo 63:8 (NVI)