Mi cuerpo vive en el reino
Jess Connolly
He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí. Gálatas 2:20 (NVI)
Tengo la plena seguridad y la esperanza que jamás seré avergonzado, sino que seguiré actuando con valor por Cristo, como lo he hecho en el pasado. Y confío en que mi vida dará honor a Cristo, sea que yo viva o muera. Filipenses 1:20 (NTV)
«Mi presencia irá contigo, y Yo te daré descanso», le contestó el SEÑOR. Éxodo 33:14 (NBLA)
El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el SEÑOR. Proverbios 16:9 (NVI)
Por su acción todo el cuerpo crece y se edifica en amor, sostenido y ajustado por todos los ligamentos, según la actividad propia de cada miembro. Efesios 4:16 (NVI)
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. Filipenses 4:6-7 (NVI)
Alégrense con los que están alegres; lloren con los que lloran. Romanos 12:15 (NVI)
Por último, fortalézcanse con el gran poder del Señor. Efesios 6:10 (NVI)
»Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto; separados de mí no pueden ustedes hacer nada. Juan 15:5 (NVI)
Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios, sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos. Efesios 5:15-16 NVI
Engañosa es la gracia y vana es la hermosura; la mujer que teme al Señor, ella será alabada. Proverbios 31:30 ( RVR-2015)
He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí. Gálatas 2:20 (NVI)
Y sucedió que a la séptima vez, él dijo: «Veo una nube tan pequeña como la mano de un hombre, que sube del mar». 1 Reyes 18:44a (NBLA)
En mi lecho me acuerdo de ti; pienso en ti en las vigilias de la noche. A la sombra de tus alas canto de alegría, porque tú eres mi ayuda. Mi alma se aferra a ti; tu mano derecha me sostiene. Salmo 63:6-8 (NVI)
Nosotros sabemos cuánto nos ama Dios y hemos puesto nuestra confianza en su amor. Dios es amor, y todos los que viven en amor viven en Dios y Dios vive en ellos; 1 Juan 4:16 (NTV)