El peligro de la deriva
Sharon Jaynes
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
Cuando llegó el séptimo día, Dios ya había terminado su obra de creación, y descansó de toda su labor. Dios bendijo el séptimo día y lo declaró santo, porque ese fue el día en que descansó de toda su obra de creación. Génesis 2:2-3 (NTV)
Y bienaventurada la que creyó que tendrá cumplimiento lo que le fue dicho de parte del Señor» Lucas 1:45 (NBLA)
Sé que el SEÑOR siempre está conmigo. No seré sacudido, porque él está aquí a mi lado. Salmo 16:8 (NTV)
El SEÑOR es mi pastor, Nada me faltará. Salmo 23:1 (NBLA)
«¡Tengan ánimo; soy Yo, no teman!». Marcos 6:50b (NBLA)
Al oír esto, Jesús les dijo: «Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los que están enfermos; no he venido a llamar a justos, sino a pecadores». Marcos 2:17 (NBLA)
Descendió con sus padres y vino a Nazaret, y continuó sujeto a ellos. Y Su madre atesoraba todas estas cosas en su corazón. Y Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en gracia para con Dios y los hombres. Lucas 2:51-52 (NBLA)
Y el que estaba sentado en el trono dijo: «¡Miren, hago nuevas todas las cosas!». Entonces me dijo: «Escribe esto, porque lo que te digo es verdadero y digno de confianza». Apocalipsis 21:5 (NTV)
Y él respondió: «No temas, porque los que están con nosotros son más que los que están con ellos». 2 Reyes 6:16 (NBLA)
Cuando veo Tus cielos, obra de Tus dedos, La luna y las estrellas que Tú has establecido, Digo: ¿Qué es el hombre para que te acuerdes de él, Y el hijo del hombre para que lo cuides? Salmo 8:3-4 (NBLA)
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
—Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios ha hecho por ti. Así que el hombre se fue y proclamó por todo el pueblo lo mucho que Jesús había hecho por él. Lucas 8:39 (NVI)
pero el ángel los tranquilizó. «No tengan miedo—dijo—. Les traigo buenas noticias que darán gran alegría a toda la gente. ¡El Salvador—sí, el Mesías, el Señor—ha nacido hoy en Belén, la ciudad de...
Mi alma se aferra a ti; tu mano derecha me sostiene. Salmo 63:8 (NVI)