El peligro de la deriva
Sharon Jaynes
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
Con tu apoyo me lanzaré contra un ejército; contigo, Dios mío, podré asaltar murallas. Salmo 18:29 (NVI)
Moisés le presentó al SEÑOR el caso de ellas, y el SEÑOR les respondió: «Lo que piden las hijas de Zelofejad es algo justo, así que debes darles una propiedad entre los parientes de su padre. Traspásales a ellas la heredad de su padre. Números 27:5-7 (NVI)
Espero al SEÑOR, lo espero con toda el alma; en su palabra he puesto mi esperanza. Salmo 130:5 (NVI)
Y Josué, hijo de Nun, estaba lleno del espíritu de sabiduría, porque Moisés había puesto sus manos sobre él; y los israelitas le escucharon e hicieron tal como el SEÑOR había mandado a Moisés. Deuteronomio 34:9 (NBLA)
Podrán desfallecer mi cuerpo y mi espíritu, pero Dios fortalece mi corazón; él es mi herencia eterna. Salmo 73:26 (NVI)
Y aconteció que cuando David acabó de hablar con Saúl, el alma de Jonatán quedó ligada al alma de David, y Jonatán lo amó como a sí mismo. 1 Samuel 18:1 (NBLA)
Porque el que te hizo es tu esposo; su nombre es el SEÑOR Todopoderoso. Tu Redentor es el Santo de Israel; ¡Dios de toda la tierra es su nombre! Isaías 54:5 (NVI)
Lámpara es a mis pies Tu palabra, Y luz para mi camino. Salmo 119:105 (NBLA)
Que su amabilidad sea evidente a todos. El Señor está cerca. Filipenses 4:5 (NVI)
En la primavera, que era la época en que los reyes salían de campaña, David mandó a Joab con la guardia real y todo el ejército de Israel ... Pero David se quedó en Jerusalén. 2 Samuel 11:1 (NVI)
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
—Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios ha hecho por ti. Así que el hombre se fue y proclamó por todo el pueblo lo mucho que Jesús había hecho por él. Lucas 8:39 (NVI)
pero el ángel los tranquilizó. «No tengan miedo—dijo—. Les traigo buenas noticias que darán gran alegría a toda la gente. ¡El Salvador—sí, el Mesías, el Señor—ha nacido hoy en Belén, la ciudad de...
Mi alma se aferra a ti; tu mano derecha me sostiene. Salmo 63:8 (NVI)