El peligro de la deriva
Sharon Jaynes
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
Pues Dios no nos ha dado un espíritu de temor y timidez sino de poder, amor y autodisciplina. 2 Timoteo 1:7 (NTV)
… ¿a ti qué? Tú sígueme no más. Juan 21:22b (NVI)
—Hija, tu fe te ha sanado —le dijo Jesús—. Vete en paz. Lucas 8:48 (NVI)
Y todo lo que hagan, de palabra o de hecho, háganlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias por medio de Él a Dios el Padre. Colosenses 3:17 (NBLA)
Me acordaré de las obras del SEÑOR; Ciertamente me acordaré de Tus maravillas antiguas. Meditaré en toda Tu obra, Y reflexionaré en Tus hechos. Salmo 77:11-12 (NBLA)
En todo tiempo ama el amigo; para ayudar en la adversidad nació el hermano. Proverbios 17:17 (NVI)
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí. … Porque Tú no te deleitas en sacrificio, de lo contrario yo lo ofrecería; No te agrada el holocausto. Los sacrificios de Dios son el espíritu contrito; Al corazón contrito y humillado, oh Dios, no despreciarás. Salmo 51:10, 16-17 (NBLA)
Él les enjugará toda lágrima de los ojos. Ya no habrá muerte, ni llanto, ni lamento ni dolor, porque las primeras cosas han dejado de existir. Apocalipsis 21:4 (NVI)
Mi Dios envió a su ángel y les cerró la boca a los leones. No me han hecho ningún daño, porque Dios bien sabe que soy inocente. Daniel 6:22a-b (NVI)
Y esta es la confianza que tenemos delante de él: que si pedimos algo conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquier cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho. 1 Juan 5:14-15 (RVA-2015)
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
—Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios ha hecho por ti. Así que el hombre se fue y proclamó por todo el pueblo lo mucho que Jesús había hecho por él. Lucas 8:39 (NVI)
pero el ángel los tranquilizó. «No tengan miedo—dijo—. Les traigo buenas noticias que darán gran alegría a toda la gente. ¡El Salvador—sí, el Mesías, el Señor—ha nacido hoy en Belén, la ciudad de...
Mi alma se aferra a ti; tu mano derecha me sostiene. Salmo 63:8 (NVI)